Os quiero hablar de una profesión de esas que pasan completamente desapercibidas, son infravaloradas casi siempre, pero sin la cual, nuestra estadía en un hotel sería un absoluto desastre: LAS CAMARERAS DE PISOS.
Conozco muy bien por lo que tienen que pasar estas pobres, la responsabilidad que, sin saberlo, soportan. Ellas son como el equipo de destrucción de pruebas después de un crimen, pero en plan sin muertes (casi siempre). Ellas dejan la habitación como si fuera a estrenar, y al día siguiente encuentran un habitáculo que habla de lo ocurrido pocas horas antes, con las sábanas aún calientes, las toallas aún mojadas, casi siempre de agua.
Pero no solo eso: ellas son testigos de nuestros gustos íntimos, nuestro caracter ordenado o desordenado, el gusto a la hora de disfrutar de Eros, y esto en muchísimas ocasiones, a la mayoría de los mortales nos daría auténtico miedo/asco. Pero ellas están acostumbradas a TODO, son unas estoicas (sin H, gracias Esther), unas superwomans que no se achican ante nada. Que hay que limpiar restos de semen de un espejo de pie que ha dejado un cliente que está enamorado de sí mismo? Pues se limpia y punto. Que un señor muy grueso se ducha, se seca sentado en la cama dejando una extraña línea del color del sombrero de Indiana Jones? Pues se limpia y punto. Que retirando las sábanas se encuentran un paquetito de medio kilo de algo parecido a la harina? Pues no pasa nada, es normal, se comunica a dirección y ellas no han visto nada.
Porque, si lo analizamos, estas buenas señoras son un peligro inminente, tienen un gran poder en potencia. Conocen los secretos que se suceden en el interior de las habitaciones donde duermen modelos, directivos de grandes empresas, importantes políticos, famosos con doble vida; son ojos velados de miriadas de infidelidades, conocen a la familia del infiel y a las amiguitas también, según el día de la semana.
Curran lo que no está escrito, atienden miles de solicitudes sin quejarse, asienten ya como si de un tic nervioso se tratara. Son el alma mater de un hotel, creedme, porque por muy buena organización que exista, si no hay un buen equipo ejecutor, esto no valdría de nada. SON HEROINAS, porque después de limpiar la mierda de un huevo de habitaciones, van a su casa y atienden a sus familias, y esto lo hacen CADA DÍA.
Desde aquí quiero felicitar a estas señoras, muy guapas todas ellas y con un gran sentido de la feminidad: porque después de quitarse el uniforme de enfermera tardan casi media hora en salir como las 4 amigas de "Sexo en NY", oliendo, no a amoniaco, pero si a Givenchy (el encontrarse olvidos de gente pudiente es lo que tiene).
Espero que no cambieis nunca, porque así como sois valeis un millon de euros repujados en oro azteca. Un beso a todas!!!!
PD (todos los ejemplos pudieran o no ser reales, las señoras que aparecen en estas dos imagenes son camareras de pisos, y han posado sin cobrar ni un duro, y eso es algo que las honra de verdad)
PD 2 (El bison es real, y es un olvido en una habitación real, y fue devuelto a su despistada dueña)
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